Este trabajo se propone lograr una aproximación a las relaciones sino-israelíes en la era posterior a la Guerra Fría. La primera sección brinda una síntesis histórica para comprender el proceso que llevó al establecimiento de relaciones diplomáticas entre China e Israel en 1992 y aporta elementos para ponderar los logros y desafíos que atraviesan las mismas. La segunda sección se refiere al comercio de armas, tanto chinas a Medio Oriente como Israelíes a China, prestando particular atención a la tecnología militar israelí y el veto estadounidense que pesa sobre la transferencia de esta hacia el país asiático. La tercera sección analiza el cambiante y acrecentado rol que China ha desempeñado en el Medio Oriente, desde mediados del Siglo XX hasta la actualidad, y sus implicancias para el Estado de Israel. La cuarta sección se introduce en las problemáticas relacionadas con el petróleo como recurso energético estratégico abordando la dependencia china. ; Instituto de Relaciones Internacionales (IRI)
A través de 1990 la evolución del militarismo global ha exhibido dos atributos centrales. Primero, hay un esfuerzo para definir los intereses vitales estadounidenses incluyendo a la mayoría o a todo el Tercer Mundo y a actuar sobre esta premisa a través de la creación de nuevas capacidades para intervenir. Segundo, la reestructuración del aparato militar estadounidense está vinculada de manera flexible a estrategias para amortiguar la declinación del poder de Estados Unidos. Los estrategas militares con frecuencia suponen acertadamente que el poder militar, económico y político están estrechamente entrelazados. Desde su perspectiva, el militarismo global proporcionará una vez más la influencia necesaria sobre Europa, Japón y otras naciones para restañar así el decadente poderío estadounidense.
Son tres los factores que básicamente inciden en la redefinición de la función militar en el área latinoamericana: los cambios en el escenario estratégico global; los procesos de consolidación democrática y la nueva relación entre civiles y militares; y los cambios en la política de EE.UU. hacia la región. Las fuerzas armadas expanden sus funciones a nuevos campos y surge un «neonacionalismo» que torna difícil la desmilitarización. Un debate nacional y regional sobre seguridad y el rol de las fuerzas armadas debería contribuir a una mejor articulación política e institucional del sector.
RESUMEN - El artículo plantea una aproximación al tema de los imaginarios de la violencia en América Latina y a la posible «lectura» de los códigos cifrados a los que esa experiencia social nos enfrenta.
Cuba has always been a particularly emotional issue in US foreign policy. However, given the current scenario, What should be the United States policy towards Cuba now that the Island no longer represents a security concern or even a foreign policy problem? This paper analyzes the internal situation of Cuba, the need for reforms, the issue of Human Rights, the position of the Cuban-American community, the interests of the United States and, the Cuban Democracy Act, to finally propose an appropriate approach to the Post-Cold War War period, and conclude that through a process of engagement, the United States can do its utmost to encourage Cuba to carry out transformations. ; Cuba ha constituido siempre un tema particularmente emocional de la política exterior de los Estados Unidos. Sin embargo, dado el escenario actual: ¿Cuál debería ser la política de los Estados Unidos hacia Cuba ahora que la Isla no representa más una preocupación de seguridad o incluso un problema de política exterior? En el presente trabajo se analiza la situación interna de Cuba, la necesidad de reformas, el tema de los Derechos Humanos, la posición de la comunidad cubano-estadounidense, los intereses de Estados Unidos, la Cuban Democracy Act, para finalmente proponer un enfoque apropiado al período de Post Guerra Fría. Y concluir que a través de un proceso de compromiso (engagement), Estados Unidos puede hacer lo máximo para alentar a Cuba a realizar transformaciones.
El siguiente trabajo se propuso evaluar factoresdeterminantes de la permanencia de la Ley deAjuste Cubano (LAC) después del fin de la GuerraFría, mediante el análisis del comportamiento dediferentes aspectos de la política doméstica estadounidensedurante los sucesivos gobiernos. Severificó que durante el Gobierno de Bill Clintondicha ley se entrelazó con el bloqueo, normativay políticamente, a partir de su connotación ideológicapara las relaciones bilaterales, a pesar de suincompatibilidad con la legislación inmigratoriaestadounidense. Sectores conservadores lideradospor políticos de origen cubano, fundamentalmentedel estado de la Florida, contribuyeron a la reafirmaciónde su vigencia a lo largo del Gobierno deGeorge W. Bush. Además, desempeñaron un papelpreponderante en el condicionamiento de las percepcionespúblicas sobre las contradicciones de laLAC, agudizadas después del inicio del proceso denormalización de las relaciones con Cuba, y comoresultado de presiones electorales y asociadas alincremento de la emigración irregular cubana, afin de protegerla contra su posible derogación. Laterminación de la política de «pies secos-pies mojados» redujo sustantivamente el universo de personaselegibles para la LAC y erosionó su racionalidad.Pero en ausencia de las condiciones objetivasque propiciaron el referido cuestionamiento, no sehan registrado esfuerzos por eliminarla, lo cual reflejaconsenso sobre su mantenimiento.This work is aimed at evaluating determining factorsof the permanence of the Cuban Adjustment Act(CAA) after the end of the Cold War, by analyzing thebehavior of different aspects of US domestic policyduring successive governments. It was verified thatduring the Bill Clinton Administration, this law wasintertwined with the blockade both normatively andpolitically, due to its ideological connotation for bilateralrelations, despite its incompatibility with USimmigration legislation. Conservative sectors led byCuban- origin politicians, mainly from Florida, contributedto the reaffirmation of its validity duringGeorge W. Bush Government. In addition, in order toprotect it against being repealed, they played a leadingrole in conditioning public perceptions on theCAA contradictions, exacerbated after the beginningof the US-Cuba normalization, and as a result of electoralpressures in association with increasing irregularCuban migration. The ending of the "wet foot-dryfoot policy" substantively reduced the number of migrantspotentially eligible under the CAA, eroding itsrationality. But, absent the objective conditions thatled to the aforementioned questioning, there havebeen no efforts to eliminate it, which reflects a consensusabout its being kept.